Sebastián Segundo

martes, 14 de febrero de 2012
Cuando tenía 10 años mi club comenzó a organizar las primeras matinees. El fin era el de recaudar plata para el viaje de los jugadores a otras provincias. Empezaban a las 19 y terminaban alrededor de las 22.  Primero fueron con los padres presentes. Luego solos. Creo que se espantaban con la música tan fuerte y veían que éramos unos pánfilos que nos mirábamos desde el otro lado de la pista en grupitos esperando que nos saquen a bailar.

Yo nunca fui muy agraciada, o al menos no le guste a ninguno. Por eso, recuerdo que tiernamente le decía a mi mama que me mandara suerte a ver si algún chico bailaba conmigo. Y también recuerdo que volvía y le decía hoy tuve suerte 3 veces. Jajaja pobre mama, que pensaría?

En uno de esos bailes me hice amiga de Noe. No recuerdo muy bien sobre ella, pero sé que le gustaba un chico de un grupito de populares. El menos agraciado (Fer). Y a mí me gustaba el otro, el carilindo del barrio (Sebastián II).

De Fer me hice amiga de inmediato. Era un pibe gordito, medio reo, pero me hacia morir de risa. Cuando me veía aburrida me sacaba a bailar una hora mientras le sacábamos el cuero a los demás. A veces inclusive pasaba en bici por el local de mi papa a charlar un rato conmigo…

Las cosas con Sebastián se terminaron dando. Creo que fue a través de otra apuesta, jajajaja los bailes esos estaban llenos de apuestas, como la de Jorge.

Empezamos a salir y nos llevábamos bien. Recuerdo que cumplíamos años con pocos días de diferencia. Y que yo iba al colegio de al lado del suyo, para que se ubiquen era compañero de Jorge. Y otras coincidencias que de chico son un mundo para vos.

No estoy muy segura como dejamos de salir, pero si mal no recuerdo, fue la primera vez que me cornearon. Con otra de las popus, obvio.

A él lo vi alguna que otra vez en el barrio. Pero siempre como desconocidos. A pesar que su papa llevaba a mi hermana al colegio todos los días y que me adoraba como su hija.

A lo largo del tiempo reconstruí la historia a través de mi compañero de colegio E.N. Supe que Jorge se había agarrado a trompadas diciendo que él era mi novio (y obviamente no lo era) con este muchacho. Supe que Fer estuvo AÑOS enamorado de mi y que salía con mi amiga solo para verme. Y también supe, que Sebastián siguió diciendo que era mi novio por un año más casi y que siempre me quiso, hasta la adolescencia, a pesar que hacía años que no nos veíamos. Vueltas de la vida eh?

A él no lo encontré mas, solo por facebook y paso de ser el carilindo del barrio al punga. Y Fer, me lo encontré cuando tendría unos 16 años. Estuvo toda la tarde sentado en frente mío y no lo reconocí. De hecho, se lo veía muy lindo y simpático (como siempre había sido) y me recordaba a alguien pero no sabía quién era. Recuerdo que me llamo la atención los aritos y la remera de una banda que me gustaba a mí también. El me reconoció a mí, según el (después de sentirme observada durante una hora y preguntarle de mala manera que le pasaba) por la forma que me mordí siempre el labio cuando estoy concentrada.





Esa fue la última vez que lo vi.

5 comentarios:

  1. Chivi dijo...:

    Qué lindas historias estás contando nena! Me encantan, quiero más!

  1. Ana dijo...:

    Pero qué lindo todo!!!! me encantó!!!! yo sabía que ese Fer se había enamorado, yo sabía!!
    Me morí de ternura con lo de "tuve suerte 3 veces"... :)

  1. sienna dijo...:

    Ay Rusi mori de amor con lo de deseame suerte...Que linda historia me encantó.Contame si hablaste con Fer despues que te reconoció.

  1. yaz! dijo...:

    me encantan tus historias son muy tiernas.
    la vida y sus vueltas es un tema que da demasiado que hablar y pensar,por eso lo importante es intentar no enredarse.
    beshito!

  1. Rusi** dijo...:

    Si Yaz, por eso las dejo pasar. Creo que hasta este momento que estoy recopilando nunca habia prestado tanta atencion a los detalles

    Ana, aca estoy para (des)gracia de uds!

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